2. Galería Larga y Chinoserie

Royal Pavilion and Brighton Museum, website images, 2014

Imagen histórica

Nash view of the Long Gallery, 1826.

Transcripción

Nada más entrar en la Galería Larga se advierte el contraste con el Vestíbulo. Dondequiera que mire, la decoración es muchísimo más elaborada. Todo es de inspiración china, desde el papel pintado de las paredes con sus motivos de bambú hasta las figuras chinas que jalonan la estancia.

Debemos este extraordinario edificio a Jorge, príncipe de Gales. El príncipe nació en 1762 y era el primogénito del rey Jorge 3º de Inglaterra, conocido como el Loco. Jorge fue nombrado príncipe regente en 1811 y pasó a desempeñar las funciones reales cuando la salud de su padre empeoró. Al morir su padre en 1820, el príncipe Jorge se convirtió en Jorge 4º.

La relación de Jorge con su padre no era buena, por lo que a menudo se refugiaba en Brighton, un pueblo costero muy de moda en la época. En parte lo hacía para escapar del control de su padre; en parte para disfrutar de la brisa marina y de sus curas de agua de mar, y también para disfrutar de la compañía de sus tíos, los duques de Cumberland y de Gloucester, grandes amantes de la diversión.

A lo largo de toda su vida, y particularmente durante su juventud, Jorge fue muy aficionado al vino, la comida, los caballos y las mujeres, y en Brighton podía permitirse todos estos placeres a su antojo. Pero Jorge fue también un hombre muy culto, con un gusto exquisito y un gran conocimiento de la arquitectura y la decoración. Y fue precisamente su visión singular lo que le llevó a construir un palacio de recreo tan suntuoso.

Jorge quería tanto impresionar como jugar con sus invitados, y el pabellón consigue ambas cosas, tanto en conjunto como en sus múltiples detalles. Una forma de conseguirlo era creando ilusiones ópticas o trampantojos. Por ejemplo, en cada extremo de esta galería hubo una vez puertas con espejos, que hacían que la galería pareciese mucho más larga de lo que realmente es. Y no todos los muebles de bambú son de bambú. Algunos son de haya, cuidadosamente pintada para parecer bambú: no solo engañan al observador sino que ponen de manifiesto la excelente factura de las piezas.

El Pabellón está repleto de decoración de inspiración china, un estilo muy popular en la Inglaterra del siglo 18, donde se conocía con el término francés de chinoiserie. Sin embargo, el Pabellón fue el primer edificio de Gran Bretaña donde la decoración china se utilizó en todas las estancias y no solo en una o dos. Tal vez al príncipe le gustara verse a sí mismo como un emperador chino rodeado de su corte, con cortesanos en forma de figuras chinas que le saludaban con sus cabezas oscilantes. O tal vez con este gusto por lo exótico, Jorge pretendía fastidiar a su padre, que era muy tradicional.

Al final de este comentario, encontrará una breve presentación fotográfica de Jorge a lo largo de su vida. Para ver las imágenes, pulse el número 201. Para saber más sobre las figuritas chinas de cabeza oscilante, pulse el número 202.

Cuando lo desee, diríjase al final de la galería para entrar en la siguiente estancia y pulse el número 3.

Figuras chinas de cabeza oscilante

No hay nada tan encantador como las figuras chinas de cabeza oscilante de la Galería Larga. Fueron realizadas aproximadamente entre 1805 y 1810 en Cantón para la exportación a Occidente. Se fabricaban con bambú, papel y arcilla sin cocer, que a continuación se pintaba con pintura soluble al agua. Podían representar a mandarines, oficiales de la corte, bufones o comerciantes. Jorge tenía nada menos que 39 de estas figurillas, que consideraba divertimentos más que obras de arte. El Pabellón Real cuenta con una de las mayores colecciones del mundo de este tipo de figuras, muchas de ellas generosamente prestadas por Su Majestad la Reina.